lunes, enero 02, 2006

El top 10 de la vergüenza : Escándalos políticos del año (2)

2. Manejo político de la transparencia.

La transparencia es uno de los valores democráticos más preciados. Sin embargo, en la incipiente democracia mexicana parece estar por debajo de los intereses particulares de los partido políticos.

En la medida en que la ciudadanía tiene acceso a la información sobre la operación de las instituciones públicas va ganando confianza en las mismas y con ello aumenta su deseo de desempeñar un rol más activo en la actividad política.

La administración del presidente Fox dio los primeros pasos hacia la incorporación de la transparencia entre las prioridades del estado mexicano, sin embargo no se percibe entre los actores políticos (incluido el partido del propio presidente) la voluntad de hacer completamente transparente el ejercicio de los tres poderes de la unión.

Durante el año 2005 observamos a la clase política sostener el estandarte de la transparencia en una mano y ocultar con la otra información de interés nacional.

El congreso de la unión, por ejemplo, cuenta con un canal de televisión de paga donde transmite las sesiones de las cámaras de diputados y senadores. Sin embargo el trabajo de las comisiones legislativas se sigue haciendo a puerta cerrada, lejos del escrutinio ciudadano.

Esta transparencia a medias del poder legislativo tuvo un papel relevante durante el proceso de desafuero del exjefe de gobierno del Distrito Federal Andrés Manuel López Obrador. El proceso de deliberación de la comisión instructora nunca fue publicado y sólo se dio a conocer la declaratoria de procedencia.

En medio de las sospechas levantadas por la polémica maniobra política del desafuero hubiera sido muy interesante para la sociedad en general conocer los argumentos jurídicos de ambas partes y poder formar un criterio con referentes distintos a la polarizada información publicada en los medios.

Otro caso digno de mencionar es el de la comisión legislativa que investigaba los negocios de Manuel Bibriesca Sahagún ,hijo de la primera dama mexicana. Los integrantes de dicha comisión no realizaron una investigación adecuada y no entregaron ninguna información de importancia durante varios meses.

Este retraso no fue casual. La intención real de los legisladores era hacer coincidir la investigación con la campaña del año 2006 y usarla para fustigar a Acción Nacional. Sin embargo los operadores políticos del PAN adivinaron el movimiento e hicieron todo lo posible por descarrilar a la incómoda comisión.

Lo adecuado hubiera sido crear una nueva comisión para esclarecer estos hechos. Pero lo que hizo el PAN con el apoyo implícito del PRI fue frenar en seco la investigación , dejando sin respuesta las muy válidas interrogantes de la ciudadanía sobre la fortuna de los hijastros del presidente.
La capital del país no se queda atrás, el Distrito Federal ocupa el vergonzoso último lugar nacional en materia de transparencia. Tiene una mala fama bien ganada.

La asamblea legislativa del Distrito Federal , compuesta principalmente por asambleístas del Partido de la Revolución Democrática decidió no hacer pública la información sobre la construcción del segundo piso al anillo periférico (vialidad más importante del valle de México).

Los que se suponen deberían representar al pueblo no tuvieron empacho en declarar que “no querían que se usara la información para golpear políticamente a López Obrador” y ocultaron los datos necesarios para llevar a cabo la auditoria de una construcción donde algún fallo técnico podría costar miles de vidas.

Sobran ejemplos de esta índole y todos demuestran el poco compromiso democrático de la clase gobernante y su hipocresía al pregonar la transparencia pero arrojarla por la ventana cuando se trata de la preservación de sus intereses.